Haciendo apaños

Llueve en Barcelona. Hace uno de esos días grises y húmedos de los que sólo te apetece quedarte en casa. He cogido la cámara de fotos y os pongo lo que hice ayer: ¡apaños!

Ya os había contado que no me gustaba como habían solucionado los de Altaya el tema apertura de la fachada y esos huecos que quedaban. Ayer estuve de obras y aunque la solución no es perfecta, el resultado tampoco ha estado mal.

Lo primero que hice fue añadir un par de maderitas a la casa, para que todo el frente quedara enrasado.

Las barnicé de color oscuro para que no desentonen con el resto de la casa aunque me temo que habrá que dar una manita de barniz al resto para que el tono sea más homogéneo.

Después me dediqué por completo al interior de la fachada. He creado unos mini tabiques y he empapelado todo el interior de la fachada con los restos de papeles que quedaban.

También he puesto una madera (de balsa) en la parte inferior. Esto hace que encaje perfectamente la fachada y que no se vea ningún hueco.

Y seguí poniendo papeles y mini-tabiques hasta obtener el resultado final. Luego pegué ventanas y contraventanas. Lo del balcón complicado: O le pongo cola de contacto o lo clavo desde dentro, porque con lo que pesa el suelo del balcón no se cuando me va a durar.

Aquí le hice un rebaje a la madera de balsa para poder encajar la puerta

Y así se queda de momento hasta que decida cómo colocar el balcón y el adorno del porche sin que se caiga constantemente.